31/1/2013


   He leído el libro colectivo 2012: la generación del fin del mundo, publicado por Huerga & Fierro, un revoltijo de textos en verso y prosa de algunos autores de la cantera ordenado por David Moralejo con una excusa tan accidental como burlesca por el supuestamente anunciado fin del mundo que profetizara la civilización maya. De entre todos, destaca mi admirado Alberto Chessa, pero este poema de Isabel Navarro es de quitarse el sombrero:




CAPILLA ARDIENTE

La noche que murió Fernando Fernán Gómez
hicimos el amor en el sofá.
Caminamos cogidos de la mano sobre los adoquines de Juanelo
y nos acercamos excitados al Teatro Español.
Los famosos pululaban en el escenario
y nosotros nos quedábamos en la platea,
esperando,
con la dócil costumbre del espectador.
Un hombre, otro desconocido, como tú y como yo
leyó un poema en una fotocopia.

No escribí nada en el libro de condolencias,
¿qué iba a decir?, ¿qué era feliz?

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