Travesía de
Vicente Muñoz Álvarez.
DE LOS TEJEMANEJES DE LA POESÍA
tantos años peleando a la contra (que diría el bueno de
Hank), tanta lucha y esfuerzo invertido en tantas causas perdidas, provocan a
la larga cierto desgaste y agotamiento... uno se termina atrincherando y lo
único que que quiere es que le dejen en paz, que le dejen en paz... pero hay
cosas que, pese a todo, sigo aún sin asimilar, por qué algunos creen que tienen
el patrimonio de la verdad, quién dicta las normas y de qué va a estas alturas
este hipócrita juego... está lo lírico y lo social, lo objetivo y lo subjetivo,
lo real y lo irreal, lo canónico y lo subversivo y muchos otros caminos, pero
creer y defender que el tuyo es el único verdadero me abre, aún hoy, viejas
heridas, cuando los mandarines del reino ponen sus vetos, los perros del amo
queman los guetos y afilan sus espolones los gallos del corral...
***
TRENZA
mi querida hermana en casa el otro día sacando fotos a mi
biblioteca y por casualidad reparando en algo que yo ya ni recordaba: una
trenza mía dentro de una vieja caja de cartón, sangre de mi sangre, entre
pétalos embalsamada... y cómo, pensé al verla, pasa el tiempo, y las tijeras
que la cortaron y las manos que la acariciaron y trenzaron y el por qué y para
qué de casi todo... mi querida hermana fotografiando nostálgicamente esa trenza,
pura regresión, y las personas que amamos y los puertos donde recalamos, los
adioses y las despedidas, los que fueron, lo que fuimos, lo que somos, los que
seguimos y lo que ya nunca será... nunca será...
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