14/10/2021


   He visto en el trabajo a una estudiante con niqab y una mascarilla negra con una bandera de España cosida. He estado un rato interpretando íntimamente esa imagen. Está claro que los símbolos importan, aunque no deberían hacerlo tanto.
   ¿No es de mayor interés nuestra conciencia que el qué dirán? Goethe apostaba por la necesaria acción. La reflexión y el conocimiento de uno mismo ya vendría después.
   He apagado el ordenador pronto. Ya he tenido suficiente ración de exhibicionismo político barato en muros ajenos, acompañado, además, de un montón de comentarios de palmeros incondicionales. Dejo a los troles en sus cuevas, están deseando salir y armar follón.
   Esta noche estaré acompañando a Antonio Gómez Ribelles en la presentación de Las lagartijas guardan los teatros, publicado por la editorial Estética del Fracaso. Conversaremos sobre casas, infancia, laberintos de la memoria y, si da tiempo, sobre los pechos de Liz Taylor interpretando a Cleopatra. Será en el auditorio del teatro romano.


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