16/10/2021


Leo la poesía jazzística de Sebastián Mondéjar en la madrugada. Es un dictado de percepciones, una olla con guiso arriesgado, un torbellino propio, impromptus donde hay nervio. Encuentro imágenes poderosas, un tono levemente alucinatorio, lo suficiente para no desbordar la magia que ofrece su palabra musical.
   Me levanto con la noticia de que Carmen Mola ha ganado el Premio Planeta 2021. Resulta que la autora era un pseudónimo. Realmente los libros de Carmen Mola los escribían tres guionistas, entre los que está Agustín Martínez, al que conozco y acabo de felicitar.
   Llega el mediodía y echo un vistazo a Lajos Zilahy. Es un escritor muy menor al que concedieron el Nobel porque tocaba políticamente. No nos perdemos nada si, tras leer Las armas miran atrás o Algo flota sobre el agua, las tiramos al contenedor.
   La novela policíaca es como una ciénaga. Cuando vienes a darte cuenta estás con el barro hasta el cuello y cuesta salir.
   A S. S. Van Dine le tengo aprecio. No me agrada en absoluto la novela tipo ¿Quién mató a Fulanito?, es decir, Agatha Christie y compañía. Christie tiene tres o cuatro novelas buenas, pero leídas éstas, leídas todas. Van Dine es como Christie, pero con pulimento, con cierta gracia, con su detective protagonista y todo: Philo Vance, que no es el infame y cursi Poirot ni la entrometida Miss Marple. S. S. Van Dine es divertido.


Comentarios

  1. Yo leí -mejor dicho, intenté leer- "La novia gitana", de Carmen Mola, unos meses antes de que le dieran el premio Planeta; ya había bastante ruido -ese ruido que nunca es por casualidad- respecto a su trilogía y tenía mucha curiosidad. En las primeras veinte o treinta páginas me sentía desubicada por su forma de narrar lo que acontecía. Continué leyendo y siguió dándome la misma sensación: sentía que el autor me estaba queriendo engañar. Dejé de leerlo. No entendía que aquella novela la hubiera escrito una mujer. Esa tarde, paseando por la playa con la que era mi pareja, que se la había leído mucho antes que yo, al contárselo reaccionó diciendo que a mi parte escritora se le iba un poco la olla. No podía hacer otra cosa que reírme, pero yo seguía pensando lo mismo.
    Y unos meses después... 😊

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tus sospechas se disiparon y te dieron la razón. Sí, creo recordar que Rosa Montero también lo anunció en un artículo meses antes del descubrimiento oficial "planetario". Otra amiga lectora también me lo ha comentado, que sospechó que no era propio de una mujer lo que se contaba en esa narración. Me hace reflexionar sobre la creencia de una pulsión "femenina" y una "masculina", cosa que, en teoría, desde ciertos discursos se querría exterminar. En fin. Es un largo debate y seguramente sin conclusiones contundentes.

      Eliminar
    2. Pues muchas gracias por la información, Juande. Ojalá me hubiera enterado de que escritoras como Rosa Montero tenían esa sensación tan fuerte, porque hasta que escuché la noticia me sentí una incomprendida hasta conmigo misma 😅
      Mi modesta opinión es que no creo que haya una pulsión "femenina" y una "masculina", no tiene por qué notarse el género del que escribe -si yo te contara...-, pero en esa novela hay cierta exageración extraña. Quizá el problema fue que intentaban tanto esconder que el escritor no era una mujer que consiguieron todo lo contrario 😉

      Eliminar
  2. Respecto a Agatha Christie, ¡mi Agatha Christie...! 😂
    Yo devoraba sus libros de jovencita, pero ya de adulta, al volver a coger algunas de sus novelas, me han resultado más bien sosas y predecibles 😉

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero... ¿Y lo feliz que te hizo a ti e hizo, hace y hará a millones de lectores durante unos años? Eso no tiene precio. Gloria eterna a Agatha. Je.

      Eliminar

Publicar un comentario