Percibo que en mi obra convergen influencias más o menos extrañas: se cruza un verso de Szymborska con un párrafo de Lispector; un hallazgo de Kathleen Raine se da la mano con ese oro molido del pensamiento que es la obra de Cioran. Hoy un elemento más se une a esa convergencia: el libro de relatos Proyectos de pasado de Ana Blandiana.
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