Cosmonauta de Pep Brocal.
Cuaderno de bitácora espacial de
Héctor, cornudo profesional y navegante encapsulado que, aparte de ir
narrándonos la causa por la que una humanidad en estado máximo de decadencia le
obligó, como a millones de habitantes terrícolas, a embarcarse en una nave
unipersonal, se cabrea continuamente con Nic, la computadora programada para
obedecer sus órdenes y mantenerlo cuerdo en una travesía tan angustiosa.
En la parte gráfica no me meto ni me meteré nunca, porque no tengo ni pajolera idea de ilustración.
Lo peor, la saturación de distopía en
la ciencia ficción. Lo mejor, la herramienta del humor, bien mezclado para
salvar el resultado final del cóctel.
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